miércoles, 9 de abril de 2008

Paris 97






Las primeras que escaneo, y ahora que pienso hace solo 10 años nadie hablaba de cámaras digitales, ni pixeles y ni siquiera internet. Y ahora, en este espacio de nada, diez años. Ni siquiera una generación y ya abandonamos lo material. Estos mundos virtuales que tenemos ahora casi parecen reales no? . No tengo esta máquina ni tres meses y el Domingo que se fue la luz casi me trepo por las paredes. Claro que después trepé en la moto y corrimos bajo el sol primero, y la tormenta después...Bueno, de que hablaba... si, de París. Y para probar, en París que el alcohol también tiene efectos benéficos (como el don de lenguas), porque ayer hable del alcohol y la memoria. Bueno, entonces dentro de diez años PaFFfff!! se viene una tormenta solar o cósmica o que se yo. Y se borran todas las tarjetas de memoria del planeta. Nada virtual, nada. Y ya los veo buscando archivos y jpgs y mp3 desesperados y no van a estar. No va a haber nada.
Pero yo de Paris tengo un huevo de fotos, y ademas una noche me tomé como 5 botellas de tinto y dicen que hable francés mejor que franchute. Y aunque yo no me acuerdo, todos mis amigos juraron que si, incluso el dueño de la licorería que me abrazo efusivamente en francés y yo no le entendía nada y los demás tampoco. Pero si no me acuerdo de eso, si me acuerdo de cada foto, y están en mi cajón, además. O sea que a París lo tengo como encajonado, y el idioma francés a no mas de 6 botellas de vino. Pero y qué de esas fotos feas?, esas que quedaban desterradas al fondo de algún armario, de una caja de zapatos, y que de repente resucitaban 20 años después con un aura mágica de reliquia. Esas tampoco van a existir, porque apenas tomas la foto todos vienen corriendo a verla en la pantalla de LCD y si no están todos como quieren hay que borrarla y sacar una nueva, y otra, y tantas veces sea necesario. Una generación digital con imagen nítida. Me gustan las fotos movidas, desenfocadas, con la cámara en el piso o sobre la cabeza. Las que salen de casualidad sin buscarlas y cuando la máquina se dispara sola.
A este post le caben muchas fotos más. Pero comienzo con estas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

se fue la luz casi me trepo por las paredes

Jejeje, identificación total!

Me gustan las fotos movidas, desenfocadas, con la cámara en el piso o sobre la cabeza. Las que salen de casualidad sin buscarlas y cuando la máquina se dispara sola

Comparto su punto de vista.
Mi primera titulación fue la de graduado en fotoperiodismo, con réflex naturalmente... y laboratorio... fijados, revelador, antihumectantes... ahhhh, eso, eso es fotografía, ya sabe, la digna heredera de la pintura donde cada imagen es única.

Un saludete y gracias por pasarse por mi casita!

:]

Pilar Cita dijo...

No es un tópico que París es la ciudad del amor. Siempre que he ido es pefecto y no creo que sea sólo mérito de mis ganas.

Me has recordado muchas noches y tienes razón, con vino, el francés se habla mejor.

No puedo comentar cada estrofa que has escrito pero coincido en todo.
Ahora salimos más guapos en las fotos (por la selección no natural), pero menos espontáneos ...

Besos de aventura y recuerdos!

Despué de rodar 5mil kilómetros, no hay quien me tome la foto.

Despué de rodar 5mil kilómetros, no hay quien me tome la foto.
La vieja cámara puesta sobre la tierra...